Te has preguntado: ¿cómo puedo florecer en el llamado de Dios en mi vida? ¿qué puedo hacer?
No estás solo.
Muchos nos hemos preguntado eso y deseamos tener las respuestas porque genuinamente deseamos hacer la voluntad de Dios en nuestras vidas e impactar las vidas de otros.
Tal vez te encuentras en una temporada de tu vida en la que no sientes claridad en tu llamado. Deseas movilizarte y florecer pero no sabes cómo hacerlo.
Lo que Dios ha puesto dentro de ti tiene mucho valor y Él desea que lo descubras. Una de las mentiras del enemigo es que creamos que no somos significativos. Él sabe que si caemos en sus mentiras, automáticamente disminuiremos nuestros esfuerzos para generar lo que Dios nos ha llamado a hacer.
PERO, al mismo tiempo, el Espíritu de Dios está dentro de nosotros que dice:
¡Tú vales!
¡Dios cree en ti!
¡Él tiene un propósito divino para tu vida!
¡Tú tienes algo para dar a los demás!
¿Qué te ves haciendo en tu interior, que te daría mucha satisfacción?
¡Estas son preguntas que te debes hacer! No si vales, si tienes lo suficiente para dar, si la gente te va a aprobar, etc.
¡Dios te ha llamado a servir a aquellos que necesitan lo que tú tienes para ofrecer!
Una de las maneras en las que puedes florecer es invirtiendo en tu preparación para lograr lo que deseas. ¡Tú vales la pena!
Invierte en tu preparación de la manera que más lo veas conveniente para que logres ir del punto A al punto B.
¡Es tu tiempo de florecer y Dios quiere ayudarte a hacerlo!
Dr. Kees-Jan de Maa
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